Me gusta comprar el pollo entero y cortarlo en presas yo mismo. De esa manera puedo recuperar la carne que normalmente no se aproveha, de las alas, la carcasa y otras partes menores.

Lo primero que hago es quitarle toda la piel al pollo, y separar las dos pata-muslo y las dos pechugas.

Todo lo demás lo coloco en una cacerola para preparar un caldo y luego separar la carne de todos los huesos, eliminando éstos, los cartílagos y los otros deshechos.

Agrego a la cacerola algunas verduras y especies y lo hiervo por una media hora.

De esta manera obtengo carne de pollo para preparar varios platos:

Dos pata-muslos que puedo utilizar para hacer un arroz con pollo o bien una cazuela de ave.

Dos pechugas, que puedo utilizar para hacer brochettes de pollo, supremas de pollo o paillard de pollo.

Y todos los restos que quedan adheridos a los huesos al hacer el caldo. El mismo caldo me sirve para hacer un risotto, una paella o una sopa.

Con un poco de paciencia, es posible separar la carne de los huesos y llevar el aprovechamiento al máximo nivel. 

Con esta carne se puede preparar un excelente relleno de empanadas o bien hacer un salpicón de ave o incluso complementar un wok de vegetales para transformarlo en wok de pollo y vegetales. Animo!!

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